NOTA PARA LOS PADRES
Cualquier niño a partir de los tres años, puede disfrutar de este
simpático programa.
Este es un perfecto juego para introducir al niño en el mundo de los
microordenadores, y proporciona una forma divertida de aprender a
manejarlos.
Los niños pueden crear una gran variedad de caras que después pueden
animar (les pueden hacer llorar, sonreír, guiñar un ojo...)
Cuando los niños empiezan a pulsar las teclas para animar la cara,
están dando instrucciones al ordenador, y utilizando a la vez una forma
fácil de programar.
En MIL CARAS hay incluso un divertido juego de memoria. Este juego
consiste en que el ordenador hace mover la cara creada con una
particular serie de gestos y el niño tiene que pulsar las teclas
adecuadas para repetir exactamente la misma secuencia. Este juego ayuda
en el desarrollo de la memoria y concentración del niño.
Tanto si el niño está creando una cara o jugando con el juego de
memoria, se familiariza con conceptos fundamentales del ordenador,
tales como MENUS, CURSORES, la tecla RETURN, la barra espaciadora,
programas simples y gráficos.
Este juego proporciona interminables horas de diversión y
entretenimiento, a la vez que le da confianza al niño en el uso del
microordenador
TRES FORMAS DE JUGAR
Cada vez que juegues con MIL CARAS, dispones de las siguientes opciones:
PULSAR 1 Para crear una cara.
PULSAR 2 para programarla y darle movimiento.
PULSAR 3 para el juego de memoria.
PARA CREAR UNA CARA
Pulsar 1 para crear una cara.
En la pantalla verás una lista de cosas para elegir (nariz, boca, ojos,
orejas y pelo). A esta lista se la conoce como MENU, en el mundo de la
informática.
Pulsa la barra espaciadora para seleccionar un rasgo y pulsa la tecla
RETURN seguidamente. Si eliges una boca, verás que en la pantalla
aparece otro menú con diferentes tipos de labios. Pulsa la barra
espaciadora para mover la flecha que señala «cuál puedes» poner en tu
cara. Seguidamente pulsa la tecla RETURN. Verás cómo la boca elegida
aparece en la cara.
De esta forma puedes continuar seleccionando rasgos hasta que completes
tu cara.
Para cambiar una cara, selecciona simplemente un rasgo y éste
sustituirá al que tenía anteriormente.
PARA ANIMAR LA CARA
Pulsa 2 para animar la cara que has creado. Una vez terminada la cara
puedes hacer que ésta se enfade, sonría, llore, mueva las orejas y haga
burlas.
Pulsa una de las siguientes letras y la cara te responderá
inmediatamente.
E Enfado
G Guiño
S Sonrisa
L Llanto
B Burla
O Mover las orejas
— Pausa
Puedes también escribir programas sencillos (secuencias de órdenes para
ser ejecutadas por el ordenador) y ver cómo realiza esta secuencia el
microordenador Para ello has de pulsar la barra espaciadora y una vez
apretada aparecerá un espacio para los programas. Escribe en este
espacio las letras que hemos visto antes en el orden que quieras. Pulsa
a continuación la tecla RETURN y mira la cara cómo se mueve. Por
ejemplo si escribes EGSB en el espacio anterior, la cara hará: enfado,
guiño, sonrisa, pausa y burla.
Cuando hayan desaparecido las letras del espacio para programar, puedes
escribir otro programa.
PARA JUGAR
Pulsa 3 para jugar al juego de memoria.
Con la cara que hayas completado también puedes jugar con un divertido
e interesante juego.
El ordenador animará la cara y tú habrás de recordar el orden en que
han aparecido los gestos, escribiéndolo en el espacio de los programas.
Para ello usarás las teclas que hemos visto anteriormente (S sonrisa. B
burla...)
Pulsa la tecla RETURN para empezar a jugar.
Mira la cara atentamente! Esta llorará, sonreirá, moverá las orejas,
etc.
Cuando deje de hacer todos estos gestos, habrás de escribir exactamente
la secuencia que ha hecho.
Por ejemplo si la cara llora y ríe, debes pulsar las teclas L y R, así
la contestación es correcta y serás felicitado.
Cada vez que aciertes, tu puntuación irá aumentando. Has de recordar el
mayor número de gestos para obtener el máximo de puntuación. La
puntuación aparece en la parte superior derecha de la pantalla.
Con práctica podrás obtener siete puntos. Llegar a los diez ya será un
poco más difícil. La mayor puntuación que conocemos fue la de una niña
de 14 años, que llegó a diecisiete puntos.